El mejor piropo de mi vida...

❝Quisiera ser pollero para pasar mi filo entre tremendas pechugotas❞

Cuando me lo dijeron aparte de morir de risa, me conmovió casi hasta las lágrimas pensando "¡qué belleza!".

Juro que es épico, ha sido lo máximo de esta semana y tenía que compartirlo con ustedes, soy socialmente responsable de esparcir el conocimiento de este GRAN piropo.

;)

"Guio guio e soy bebebe" (o por lo menos así lo pensaba)

Hoy me topé con una canción que hacía mucho tiempo no escuchaba y dicho sea de paso es muuuy mala, pero tuvo su momento de gloria por allá en los años 90's, interpretada por Jordy, un niño de nacionalidad francesa que a los 4 años de edad sacó su primer -y único- hit musical llamado "Dur, dur d'etre bébé!" (que muchos años después me enteré que significa "qué difícil es ser bebé", porque obviamente de niña solo la "washawasheaba" jaja).

Bellísima melodía.

Pero en mi recuerdo lo más supremo no era que hubiera estado de moda, sino que en Sinaloa, en esa época estaba muy de moda un show de "talento infantil" (ajá) llamado "Niña Fantasía y Talento" (si, existe lo juro, pueden darle click en el título para que vean que no miento) en el cual un grupo de niñas participan en una competencia onda "Nuestra belleza" y se presentan, modelan, hacen un "bellísimo" chousito, se presentan en traje de baño, de gala "y así", la ganadora de cada municipio, después compite con las demás ganadoras, coronándose así como la Niña Fantasía y Talento Sinaloa -inserte el año en que se hace el concurso- (wooooooooooooow). 

¡Sí, lo admito! una día solamente fuí a una de esas clases de ensayo que les daban a las niñas, porque una prima estaba ahí, y era LA ONDA (cof cof... según). Recuerdo a las niñas caminando y ensayando la forma de decir que querían un mundo lleno de paz como si de verdad supieran qué estaban diciendo, mientras yo podía sentir una gran frustración porque mis papás no me habían dejado participar en ese evento de alta categoría, en mi cabeza daban vueltas preguntas como "¿porqué mi prima si y yo no?", pero mis papás tomaron firmemente la desición que yo tuve que acatar. 

Llegado el día del evento, fuimos a apoyar a mi prima (quién quedó como princesa o una madre así, segundo lugar pues, aunque el triunfo de la otra niña fué muy criticado y hasta se comentó que hubo mano negra jajajajajajaja de verdad, ese drama y especulaciones fueron reales) y ahí estuvimos la familia reunida con botes llenos de piedras para la porra y en eso, ¡fuera luces! y sonó, Dur, dur d'etre bébé! (que a mi me sonaba más como "guio guio e soy bebebe") y salieron a la pasarela las niñas sintiéndo seguramente que Jordy les cantaba al oido.

Después asumo que la canción siguió sonando y se quedó como un clásico de nuestros tiempos de niñez (entre otras muy malas canciones, que seguramente me recuerdan a otras cosas igual de malviajadas de mi infancia y espero recordarlas una a una para postearlas jajaja si, ¡es amenaza!)

Pero para mi, esta canción, es el gran openning de "Niña fantasía y talento Navolato 199_".

Por cierto, yo quisiera agradecer públicamente a mis padres por ese tipo de prohibiciones que me permiten sentirme orgullosa de mi por no haber sido partícipe de ese tipo de eventos jaja lo que sí es que a lo mejor nunca les perdone otros crímenes (de moda mayormente) que si me permitieron en la vida. Pero esa, es otra historia...

Peace out! ;)

Crónica de un tatuaje...

Esperé un aproximado de 3 a 4 años para hacerme mi 3er. y último tatuaje (según yo será el último, pero como sabemos los tatuajes luego son como una adiccion, tienes el 3ero. y estás pensando en el 4to. y así sucesivamente, ¡pero no! me contendré y será el último). Desde el momento en que por azares del destino ví el dibujo de Xõchiquétzal fué como una atracción margnética, de esas veces que sabes que ésa imagen (en este caso) es para ti o seguramente va a tener algo que ver en tu vida. 

Posteriormente me dí a la tarea de investigar su significado, capaz que era una onda como "agricultora de frijol" que obviamente no iba a venir al caso jaja pero no, en su lugar me encontré con lo siguiente:

❝ Xõchiquétzal (Náhuatl: Xõchiquétzal, "flor hermosa"). Su nombre significa Xochitl, flor y Quetzal, hermosa; "pájaro florito", "flor y pluma rica" o "flor hermosa", y es la joven diosa de la belleza, de las flores, el amor, el placer amoroso y las artes. Es una de las diosas relacionadas con la fertilidad de la naturaleza y la belleza, quizá por ello se le relaciona como hija o esposa de Centéotl (quién era el Dios del maiz). Xõchiquétzal, nació de los cabellos de la diosa madre.❞

Creo que con ello dejo al descubierto parte de mi egocentrismo ¡pero bueno! díganme realmente ¿qué persona no tiene en su ser aunque sea un poco del mismo? ¿Conocen a alguien? ¡NO! Hasta conozco feos/as que se creen guapos/as, en realidad creo que de esos abundan jajaja ya pues ya, déjome de burlarme del prójimo y prosigo.

Tenía a mi familia "amenazada" o "advertida" con la idea de que estaba por venir mi 3er. tatuaje (porque realmente creo que nunca he pedido permiso para nada que me he hecho), la mayoría decían "ya deja de hacerte cosas así, solo te lastimas" "ya otro no hija, ya con los que tienes está bien" "ay no que dolor, yo no podría, seguro eres masoquista" (esto dicho por personas de más de 30 años). Mientras la juventú de la familia decían que estaba chido o realmente les importaba poco.

Aproximadamente el 13 de septiembre del 2009 (cuando después de ciertas circusntanias, vivencias y demás situaciones en mi vida decidí que ya era tiempo de llevarlo a cabo), me dí una vuelta por la zona rosa a un local de tatuajes y perforaciones recomendada por Lala a preguntar el costo de mi divino diseño, estaba consciente de que no sería barato dada la complejidad del diseño por el detalle que tiene, una chica de cabello rojo me explicó que tenían básicamente que hacerlo doble, porque tenía que llevar un contorno blanco para que la tinta negra no se expandiera y obviamente eso quería decir: doble costo. Pedí una tarjeta, dí las gracias y acompañé a Ximena a que se hiciera su perforación en la lengua del otro lado de la pared divisoria entre los tatuajes y las perforaciones.

En sí no se me hacía carísimo, pero si fué un precio que tenía que pensar, hacer mis cuentas, pensar a quién podía estafar (jaja) y el tiempo aproximado que esto llevaría. 

Regresé acompañada de Fhel y Ximena el 22 de sept. de 2009 a la elaboración de mi tan deseada Xõchiquétzal. Ya tenía la cita con Oscar (el tatuador oooobviamente), llegamos puntuales a la misma y estuvimos esperando un rato porque Oscarito no llegaba y solo hacía crecer más mi ansia. Aunque debo admitir que soy fan de esa sensación de incertidumbre que se tiene antes de un tatuaje o una perforación. (Mmmmm después de todo creo que si tengo algo de masoquista como dice mi familia jajaja)

En la sesión fotográfica antes de que llegara mi tatuador. 

Mostrando el diseño de Xõchiquétzal.

Xim, Fhel y yo haciendo estupideces con tanto tiempo libre.

Como 30-40 min después llegó Oscar diciendo que había tenido que ir a comprar no sé que cosas, se puso a contestar unas dudas a un tipo que estaba ahí, preparó su equipo, checó que todo estuviera estéril y todo eso que hacen los tatuadores antes de empezar a chambear, para posteriormente llamarme, "calcar" el stencil en el lugar que lo quería y una vez colocado empezar a trabajar.

Ahí ya iba un poco avanzado.
Foto tomada por mi queridísimo Fey, digo, Fhel.

La sesión duró un aproximado de 2 horas, en las cuales Oscar me preguntó fácil unas 10 veces cómo iba, yo, toda una machita ¡aguanté!, pero he de confesar que ya a la mitad del contorno blanco, me dolía bastante (ya había hecho todo lo negro, y ahora era volver a hacerlo nuevamente, pero para ese entonces la piel estaba ya bastante lastimada) además al tener tan cerca la máquina de la oreja, el sonido después de hora y media, créanme, es castrante.

Cuando escuché las gloriosas palabras, "Creo que ya quedó, chécalo", fué un momento poca madre, porque aparte de que el sufrimiento terminaba, por fin estaba plasmado aquello que deseé por tanto tiempo. Me paré, lo vi en el espejo y me pareció magnífico. regresé a la camilla a que lo limpiaran y le pusieran su respectivo plástico y me dí la mareada de mi vida, así que Xime y Fhel corrieron al oxxo de la esquina por una coca cola por indicaciones de Oscar, en lo que él procedía a tapar el tatuaje.

Después de estar unas 3 horas ahí, fuimos libres, yo, como niña que había pasado por una experiencia traumática, fuí complacida por Xim y Fhel en mi deseo de ir a comer unas pizzas en la roma. :)

Mi tatuaje lucía mucho mejor al día siguiente:

Aún ardía un poco, pero ya cosa de nada. 

¡Maldita línea blanca! Bueno no, la verdad es que si quedó muy detallado.

Ese día terminó siendo perfecto, buenos amigos, buena experiencia, tatuaje poca madre, mucha risa, idiotez sin medida, comida rica, música, más risas, risas y risas...

❤

Conclusiones inconclusas.

Este es un lugar cerca de mi trabajo:

Saque sus propias conclusiones de las actividades realizadas en este negocio, que seguro las mías son re cochinas.

;)

Lo cortez no quita lo cabral, ni mi aburrición.

Transcurrían los años 90's cuando mi mamá y mi tía Oly tuvieron la genial idea de llevarnos a mi prima Tania y a mi a "culturalizarnos" al concierto de Facundo Cabral con Alberto Cortez (no, no sé en qué estaban pensando), el cual llevaba por nombre el título de este post, fué el primer concierto al que asistí en mi vida. ¿Padre? A decir verdad...  ¡NO!

¡Fué desquiciante lo juro! (que haciendo cuentas, creo que fué a partir de ello que mi demencia creció). Es el concierto más aburrido al que he ido en mi vida, además de que nos fuimos muy arregladitas porque según así debía ser porque iba a ser en el H. Teatro Pablo de Villavicencio en Culiacán, iba puro adulto contemporáneo tirandole a super maduros (por no decirles viejos jaja), y ¡bueno! la música para dormir...

Recuerdo que estabamos en las butacas del teatro y yo sentía un grado muy elevado de desesperación por el nivel de sueño que ya manejaba para la mitad del concierto, intentaba dormirme en la butaca, pero sentía que no era prudente y así intentaba luchar contra ese sueño que para el tercer cuarto del concierto pesaba toneladas, honestamente, no recuerdo si me dormí, todo es borroso ya para ese entonces, lo que sé es que fué como un gran alivio cuando escuché aplausos (creo que hasta me paré a aplaudir -aunque seguro fué de alivio-).

Desde ese día mi mamá me bromeaba cuando me iba a dormir diciéndome que si quería me podía arrullar con el disco en cuestión, a lo que yo solo respondía con unos ojos de "já, que chistosa".

Creo que desde ese entonces me había quedado una impresión no tan chida de los conciertos, hasta que de un tiempo hacia acá me les he unido a los Manitos como buen tercio o mosca a diversos conciertos y he descubierto mi fascinación por los mismos, obviamente, hoy voy a conciertos levemente diferentes, como Phoenix, Royksopp, Friendly fires, etc.

Porque seguro de volver a ir a "lo Cortez no quita lo Cabral" volvería a ser la misma triste historia... aunque esta vez, me llevaría una muy buena almohada ;)